En un sartén agregar la cebolla, cuando esté transparente añadir un chorro de aceite de oliva, cocinar por 20 minutos, agregar el azúcar y revolver por 5 minutos, agregar 1/4 de agua y dejar cocinar por 20 minutos más hasta que esté blanda la cebolla.
Hidratar los tomates deshidratados con agua cliente por 20 minutos, luego cortar finamente.
En 50 ml de agua tibia disolver la miel y la levadura fresca dejar reposar por 15 minutos hasta que se active.
En un bol unir la harina, sal, aceite de oliva, leche y el resto del agua tibia. Continuar con la levadura y la miel, lo puedes hacer con la batidora usando el garfio que trae o con las manos. Debe quedar un poco pegote en las manos.
Dale forma de bola en un bol con un poco de aceite de oliva y dejar leudar por 40 minutos en un lugar tibio hasta que doble sus volumen.
Amasar nuevamente la masa, tomarla y ponerla en una fuente para horno, con la ayudar de los dedos la vas estirando. Dejarla repostar tapada 20 minutos más en un lugar tibio.
Precalentar el horno a 200 grados celsius.
Añadir la cebolla caramelizada y los tomates, cocinar por 20 minutos o hasta que la masa esté dorada.