Hace rato que quería hacer esta receta, la había comido en el restorant Quinoa y encontraba que eran lo máximo. Además siempre ando buscando como darle legumbres a mis niños sin que aleguen. Pues este plato es la opción, una maravilla, con ricos aliños, solo hay que dejar remojando los garbanzos la noche anterior!
- Medio kilo de garbanzos o de habas secas peladas (dejar en remojo la noche anterior)
- 2/3 cebollas picadas
- 1 taza de perejil fresco
- 3 dientes de ajo, picados
- 1 cucharadita de comino molido
- 1 taza pan rallado.
- 1 cucharada de bicarbonato
- 1 cucharada de sal
- 1 pizca de pimienta negra
- Aceite para freír
- 2 tipos de lechugas
- 2 a 3 betarragas
- Un yogurt
- 1 cucharada de menta picada
Dejar remojando los garbanzos en una fuente con agua, a la mañana siguiente ponga más agua para que se sigan hidratando.
Triturar directamente los garbanzos “sin cocer” en la juguera junto con la cebolla, los ajos, el perejil fresco y una taza y media de agua. Mezcle hasta conseguir una textura espesa.
Añadir la sal, el comino molido, la pimienta negra, el bicarbonato y mezclar un poco. En un colador grande poner la mezcla y apretar para sacar el agua que sobra.
Dejar reposar la mezcla durante 30 minutos.
Agregar la taza de pan rallado y mezclar bien, luego formar con la mezcla pequeñas hamburguesas, aplastándolas. Si la mezcla le queda demasiado húmeda por lo que le es difícil formar bolitas, se puede añadir un poco de pan rallado.
En un sartén con aceite de oliva a fuego medio freír las falafel, cuando estén doradas poner en una toalla absorbente.
Servir con un mix de ensalada verde y beterraga, yogurt con menta y los falafel.
